La filosofía de la medicina oriental dice: “El médico visitaba la casa a menudo, tomaba el pulso y controlaba
los signos vitales de cada uno de sus inquilinos, y les aconsejaba sobre las medicinas
que le convenían a cada uno, a fin de prevenir antes de que aparezcan las
enfermedades.“
Siguiendo esta filosofía conseguiríamos mantenernos
más tiempo sanos y sin dolencias, en vez de esperar a sufrir dolor u otro síntoma
para acudir a tratamiento. Si fuésemos como mantenimiento conseguiríamos evitar
problemas que sufrimos todos como son los tensionales, contracturas,
calambres,...
Todos
sufrimos o hemos sufrido de dolor de espalda(cervicales, dorsales o lumbares)
provocado por el estrés, preocupaciones, nervios o por malas posiciones que
adoptamos por culpa del trabajo.
Adoptando
un mantenimiento, el cuerpo se acostumbra a tener su sesión una vez al mes para
ayudar a prevenir de posibles lesiones y para sentirse bien físicamente.
Se
acostumbra a recibir tratamiento terapéutico. El mismo cuerpo nos avisa de
cuándo empieza a necesitar tratarse: se queja, nos duele, nos contracturamos,
nos avisa del estrés, de nervios y preocupaciones…
¿Por qué nos contracturamos? Ya sea por estrés, nervios, preocupaciones o malas posturas, las
fibras musculares se contraen, y esa contracción mantenida en el tiempo sin que
haya una relajación es lo que provoca la contractura o “nudo”. Cuando palpamos
la zona que nos duele, lo que encontramos es una zona abultada y dura. Para
disminuir ese nudo, una de las formas que nos ayuda es el estiramiento, pero si
con el estiramiento no es suficiente, es aquí cuando pensamos en tomar alguna
pastilla que nos alivie del dolor… Pero si escuchamos a nuestro cuerpo,
sabremos que necesitamos algo más que una pastilla para disminuir el dolor e ir
al foco del problema, esto es bajar el tono muscular para eliminar la
contractura.
Es
muy importante escuchar y entender a nuestro cuerpo y después, cuando conseguimos eso, poner remedio. Por eso el
recibir tratamiento no es solo para cuando tengo una lesión, es también para
ayudarnos a prevenir futuras lesiones y mantenernos en un buen estado de salud.