miércoles, 4 de febrero de 2015

TRATARNOS HABITUALMENTE COMO PREVENCIÓN Y/O MANTENIMIENTO

La filosofía de la medicina oriental dice: “El médico visitaba la casa a menudo, tomaba el pulso y controlaba los signos vitales de cada uno de sus inquilinos, y les aconsejaba sobre las medicinas que le convenían a cada uno, a fin de prevenir antes de que aparezcan las enfermedades.“

Siguiendo esta filosofía conseguiríamos mantenernos más tiempo sanos y sin dolencias, en vez de esperar a sufrir dolor u otro síntoma para acudir a tratamiento. Si fuésemos como mantenimiento conseguiríamos evitar problemas que sufrimos todos como son los tensionales, contracturas, calambres,...

Todos sufrimos o hemos sufrido de dolor de espalda(cervicales, dorsales o lumbares) provocado por el estrés, preocupaciones, nervios o por malas posiciones que adoptamos por culpa del trabajo.
Adoptando un mantenimiento, el cuerpo se acostumbra a tener su sesión una vez al mes para ayudar a prevenir de posibles lesiones y para sentirse bien físicamente.
Se acostumbra a recibir tratamiento terapéutico. El mismo cuerpo nos avisa de cuándo empieza a necesitar tratarse: se queja, nos duele, nos contracturamos, nos avisa del estrés, de nervios y preocupaciones…
¿Por qué nos contracturamos? Ya sea por estrés, nervios, preocupaciones o malas posturas, las fibras musculares se contraen, y esa contracción mantenida en el tiempo sin que haya una relajación es lo que provoca la contractura o “nudo”. Cuando palpamos la zona que nos duele, lo que encontramos es una zona abultada y dura. Para disminuir ese nudo, una de las formas que nos ayuda es el estiramiento, pero si con el estiramiento no es suficiente, es aquí cuando pensamos en tomar alguna pastilla que nos alivie del dolor… Pero si escuchamos a nuestro cuerpo, sabremos que necesitamos algo más que una pastilla para disminuir el dolor e ir al foco del problema, esto es bajar el tono muscular para eliminar la contractura.


Es muy importante escuchar y entender a nuestro cuerpo y después, cuando  conseguimos eso, poner remedio. Por eso el recibir tratamiento no es solo para cuando tengo una lesión, es también para ayudarnos a prevenir futuras lesiones y mantenernos en un buen estado de salud.