jueves, 13 de septiembre de 2012

RETENCIÓN DE LÍQUIDOS Y PROBLEMAS CIRCULATORIOS

PROBLEMAS CIRCULATORIOS, PESADEZ Y RETENCIÓN EN MIEMBRO INFERIOR

Por fin ha llegado el verano, pero cuando el calor aprieta a algunas personas les afecta de forma negativa: pesadez, cansancio, calambres, hormigueos, hinchazón... En general, sufren los problemas de mala circulació

n.

El calor tiene un efecto vasodilatador sobre las venas y provoca un aumento de este tipo de molestias como una respuesta inadecuada a los cambios de temperatura, lo que puede hacer que las personas que padecen problemas circulatorios, tengan antecedentes familiares de varices o incluso no hayan sufrido estos problemas nunca vivan el verano como un verdadero suplicio.

No te resignes a sufrir. Aplicándote ciertos tratamientos y siguiendo unas sencillas pautas, evitarás la pesadez de piernas y las varices, que en esta época afectan a un 80% de las mujeres mayores de 35 años.

En Fisiovisan te ofrecemos distintos tratamientos para que no tengas que pasar por el suplicio de los problemas de circulación:

DLM : El Drenaje Linfático Manual (DLM) es un tipo de masaje muy específico y suave que tiene muchas indicaciones:
- Edemas de todo tipo y piernas cansadas
- Celulitis o lipedema.
- Linfedema congénito y adquirido (quirúrgico, traumático, etc).
- Trastornos circulatorios venosos: varices, arañas vasculares, etc.
- Retención de líquidos.
- Úlceras por presión.
- Nerviosismo, estrés, insomnio, ansiedad.
- Embarazo: edemas, prevención de estrías, descarga de piernas.
- Enfermedad de Sudeck.

Así mismo, podemos observar sus múltiples beneficios desde las primeras sesiones:
- Drena, desinflama, limpia, protege, desintoxica, oxigena y nutre los tejidos.
- Mejora la microcirculación.
- Estimula el sistema inmunológico.
- Relaja.
- Disminuye el volumen, calma el dolor.
- Regula el tono muscular.
- Crea canales nuevos de drenaje.

Masaje circulatorio: Especialmente indicado para piernas cansadas, para personas que permanezcan muchas horas de pie y para el tratamiento de varices incipientes y ateroesclerosis. Se da con un gel de efecto frío que estimula la circulación.

Presoterapia: Se trata de una técnica de electroterapia en la que el paciente mete sus piernas en unas botas hinchables en las que con ayuda de un compresor se insufla aire a una presión correctamente dosificada aplicando en las zonas a tratar, compresiones que activan la circulación.

Está indicada para mejorar la circulación, cuando existen problemas en postoperatorios, como complemento de tratamientos contra la celulitis y varices y ante problemas de retención de líquidos. Además es un gran aliado en los tratamientos pre y post-liposucción, anti-estrés, piernas cansadas, e hinchazón localizada. Se trata de una técnica poco invasiva, sin riesgos, que puede aplicarse en todas las edades y que proporciona además una agradable sensación de relajación y bienestar.

Los beneficios de la presoterapia son los siguientes:
- Mejora el sistema circulatorio, aumentando el oxígeno en el cuerpo y disminuyendo la tensión sanguínea.
- Mejora el sistema linfático, al nutrir mejor las células y eliminar toxinas, al mismo tiempo que se estimula el sistema inmunológico.
- Estimula y tonifica músculos y articulaciones, ayuda a relajarlos y alivia la fatiga proporcionando una agradable sensación de bienestar.
- Relaja los músculos abdominales e intestinales, mejorando el funcionamiento del aparato digestivo.

Vendas frías: Son vendas impregnadas con líquido frío que envuelven la zona que se desea tratar. La temperatura del cuerpo desciende localmente produciendo un aumento del metabolismo celular y el flujo sanguíneo en la zona por lo que es un gran aliado en la lucha contra la flaccidez y las piernas cansadas. También esta técnica tiene muchos beneficios:
- Mejora la circulación y produce una contracción de la musculatura.
- Mejora las funciones gastrointestinales.
- Aumenta el metabolismo celular.
- Tienen una acción antiinflamatoria y ayudan a evitar derrames.
- Mejoran el sistema nervioso.
- Eliminan toxinas.

En Fisiovisan te atenderán fisioterapeutas colegiados que dominan todas estas técnicas. No pongas tu salud en manos de cualquiera.

Además, aquí te damos unos sencillos consejos para solucionar más fácilmente estos problemas:
• No expongas las piernas al sol durante tiempo. Usa tejidos frescos como pareos o faldas largas.
•Intenta elevar las piernas siempre que puedas. Pasea o cambia de postura.
• Dúchate las piernas con agua fría.
• Pasea por la orilla del mar con las piernas dentro del agua.
• Haz ejercicios de gemelos como ponerte de puntillas repetidamente, así como hacer círculos con los tobillos a un lado y al otro
• Cuida tu alimentación
• Evita los alimentos picantes y los grasientos.
• Incluye fibra en tu dieta a través de fruta, verdura y cereales integrales.
• Evita el exceso de sal, que favorece la retención de líquidos. Condimenta las comidas con hierbas aromáticas.
• Reduce la ingesta de alcohol y café y toma infusiones con hierbas diuréticas, que mejoran la circulación.
• Añade ajo y cebolla a tus platos. Estos alimentos son muy buenos para estimular la circulación.
• Bebe mucha agua, por lo menos 2 litros al día, para eliminar toxinas.








SISTEMA LINFÁTICO

CONSTITUCIÓN:
El sistema linfático está constituido por los vasos y los ganglios linfáticos. Consiste en una red de tubos ciegos (terminales), los capilares linfáticos, extremadamente finos, que penetran en muchos tejido

s excepto en el nervioso, y que se hallan próximos a los lechos o redes capilares sanguíneos. Los capilares linfáticos continúan y se va reuniendo en conductos cada vez mayores, los vasos linfáticos, que son similares a las venas por poseer tejido conjuntivo y válvulas en sus paredes, para finalmente desembocar en el sistema venoso.
A través de los vasos linfáticos circula un líquido llamado linfa, de una composición similar al plasma sanguíneo. Su misión consiste en recuperar el exceso de líquido y proteínas de los tejidos y devolverlos a la circulación sanguínea

FUNCIONES:
En su flujo a través del sistema linfático, la linfa se encarga de arrastrar toxinas, gérmenes y moléculas grandes que el sistema venoso no puede recuperar. Puede eliminar proteínas atrapadas y moléculas de grasa de los tejidos. A su paso por el sistema linfático atraviesa ciertas zonas llamadas ganglios linfáticos, donde deja las sustancia tóxicas y gérmenes que ha recogido durante su circulación. En los ganglios linfáticos es donde se encuentran los linfocitos, células que forman parte del sistema inmunitario, encargado de atrapar y destruir las partículas tóxicas y extrañas mediante, por ejemplo, la formación de anticuerpos. Por ejemplo, cuando una persona tiene amigdalitis, esto significa que tiene inflamados los ganglios linfáticos del cuello, debido a que se ha producido una infección y los gérmenes han sido atrapados en esta zona por dos motivos: 1) impedir que pasen a las vías respiratorias bajas y pulmón, donde el daño que causarían sería más grave, y 2) destruirlos.

Por tanto, el sistema linfático juega un papel importante en le mantenimiento de la salud.

MOTOR DEL SISTEMA:
El sistema linfático no posee un órgano impulsor como tal, como sucede con el corazón en el caso del sistema circulatorio, pero los vasos linfáticos se encuentran siempre situados entre el tejido muscular, por ello, cuando se contraen los músculos (por ejemplo al mover los brazos o piernas), la linfa es impulsada a través de la red linfática, evitándose que retroceda gracias a la existencia de las válvulas. Finalmente, la linfa es vaciada en la corriente sanguínea venosa a nivel de la vena subclavia izquierda

PROBLEMAS:
En ocasiones, por inmovilidad, problemas en los ganglios linfáticos (generalmente consecuencia de ciertos fármacos), mala circulación o simplemente calor, se tiende a acumular mayor líquido en ciertas zonas (generalmente miembros inferiores). En estos casos, el drenaje linfático manual (DLM) se encuentra completamente indicado. 









RETENCIÓN DE LÍQUIDOS

Debido a cuestiones hormonales, la retención de líquidos es un problema que afecta especialmente a las mujeres. La retención de líquidos, denominada también ‘edema’, ocurre cuando por algún motivo nuestro cuerpo es in

capaz de eliminar el líquido necesario para mantener el equilibrio natural del organismo.

Aunque en principio la retención de líquidos pareciera no entrañar mayor peligro, es necesario prestarle atención, pues podría ser síntoma de un padecimiento de salud más grave como hipertensión, cardiopatías, problemas renales o del hígado.

*¿Qué produce la retención de líquidos?:
Existen muchos factores que pueden provocar la retención de líquidos, entre ellos:
- las fluctuaciones hormonales producidas por el embarazo o la menopausia
- una alimentación rica en sal
- falta de proteínas y nutrientes
- exceso de consumo de alcohol
- una vida sedentaria
- trastornos cardiacos, renales o hepáticos
- uso de ciertos medicamentos.
- alteraciones en los vasos linfáticos
- problemas de obesidad
- varices
- inflamaciones o enfermedades inflamatorias
- insuficiencia venosa
- el calor o la humedad
- uso de ropa demasiado ajustada.

Es importante descubrir las causas que están provocando la retención de líquidospara poder tratarla eficazmente. Usualmente los edemas leves se corrigen con medidas sencillas, sin embargo, conviene acudir al médico para descartar que la causa se deba a problemas mayores de salud.

* Síntomas de la retención de líquidos:
Los principales síntomas de la retención de líquidos son: aumento de peso inexplicable, piernas o manos hinchadas, pesadez y malestar general, palpitaciones, debilidad y calambres. Además, estéticamente hablando, puede provocar celulitis y un aumento de volumen considerable.

Una sencilla manera de saber si estamos reteniendo líquidos, consiste en ejercer presión sobre la piel en la zona hinchada, y si queda marca durante demasiado tiempo, es señal de que estamos reteniendo líquidos.

* Remedios sencillos y efectivos para eliminar la retención de líquidos:
Si los problemas serios han sido descartados, puedes recurrir a remedios sencillos y efectivos para eliminar la retención de líquidos. Toma nota.

Drenaje Linfático Manual: Consiste en una técnica que realizada por un profesional, mejorará la retención de líquidos.


 

Bebe suficiente agua:
Mientras más agua bebas, podrás expulsar más fácilmente los líquidos sobrantes. Lo recomendado es beber de un litro y medio a dos litros diarios. También puedes ingerir zumos e infusiones. Para ayudarte a eliminar los fluidos acumulados durante la noche, bebe un vaso de agua justo al levantarte.

Haz ejercicio:
Realiza actividades que impliquen mover las piernas, como caminar, nadar, andar en bicicleta, subir y bajar escaleras, etc. Esto facilita trabajo a los riñones.

Dieta:
Una dieta rica en proteínas evita la retención de líquidos, pues tras la ingestión de alimentos que las contienen, el hígado produce albúmina, una sustancia necesaria para que los fluidos no se acumulen en los tejidos.
Tu dieta debes ser además rica en verduras, hortalizas, frutas, legumbres e hidratos de carbono complejos (pasta, arroz), así como alimentos ricos en potasio en general como el banano. Entre las verduras y hortalizas más recomendadas están: las patatas, tomate, calabaza, calabacín, setas, alcachofas, espárragos, y berenjenas.

Descansa
El reposo es esencial para evitar laretención de líquidos. Descansa ocho horas por la noche y si tu ritmo de vida lo permite, una hora después de comer. Si la retención de líquidos se acumula en las extremidades inferiores, recuéstate y eleva los pies, al menos una hora por las tardes. No uses ropa, zapatos o calcetines muy ajustados.

Métete al agua:
Métete al mar, a la piscina o a tu bañera y una vez dentro, mueve las piernas para que los músculos bombeen los líquidos hacia la vejiga. La presión que ejerce el agua facilita la expulsión a través de la orina.

*Importante:
No utilices medicamentos diuréticos. Esto es especialmente importante para las mujeres que están embarazadas y sobre todo durante las primeras semanas de gestación.

Los diuréticos solo deben tomarse bajo prescripción médica, pues si se consumen habitualmente, pueden provocar el efecto contrario o rebote, es decir , hacer que el organismo retenga sales y agua. En todo caso sustitúyelos por alimentos con efecto diurético.

No hay comentarios:

Publicar un comentario